Transnacionales

 Trasnacionales 

Las empresas trasnacionales (ETN) tienen una función estratégica en la economía mundial; sin embargo, su alcance trasciende los mercados y las inversiones. Frecuentemente, se les ha acusado de complicidad en violaciones a los derechos humanos, ya sea a través de la perpetración directa, el beneficio económico o el consentimiento pasivo al abuso (Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, 2003, p. 6).

Normas internacionales y desafíos  

Para mantener a las empresas bajo control, en el año 2003 se establecieron las normas sobre la responsabilidad de las empresas transnacionales en el ámbito  de los derechos humanos con el propósito de controlar el descontrol de las violaciones de derechos elementales en cada una de sus actividades. Sin embargo, el respeto a estas normas sigue siendo un problema porque no son obligatorias y muchas empresas prefieren aceptar códigos de conducta social que son opcionales, que no siempre funcionan (Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, 2003, p. 9).

El problema es aún más serio cuando estas firmas actúan en naciones que tienen instituciones poco consolidadas y donde legalmente pueden especular y hacer lo que les plazca con nula responsabilidad social. La ausencia de control en estos casos permite que haya explotación del trabajo y de los recursos sin pagar el precio real del abuso (Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, 2003, p. 12).

Conclusiones 

Las empresas transnacionales tienen un papel importante en el crecimiento económico, sin embargo, su actividad debe ir acompañada de responsabilidad social y un entendimiento de los derechos humanos. Sin regulaciones más rigurosas y mecanismos de control efectivos, el riesgo de mantener prácticas abusivas persiste.